Afortunada criatura, escucha:
Mente -aunque esa gran palabra es bien conocida- es desconocida para la gente, conociéndola equívoca y parcialmente; y por la falta de comprensión de su realidad, surgen inconcebibles declaraciones filosóficas.
El individuo común y alienado, al no comprenderlo, al no comprender su propia naturaleza, sufre vagando a través de las seis formas de vida en los tres reinos. Esta es la consecuencia de no realizar esta realidad de la mente.
Discípulos y ermitaños proclaman la realización de una parcial carencia de yo, pero no lo saben con exactitud, aumentando las proclamaciones desde sus tratados y teorías, no contemplan la clara luz transparente.
Discípulos y ermitaños se niegan la entrada al aferrarse a sujeto y objeto, los Centristas se niegan la entrada por extremismo hacia las dos realidades, Tantristas Rituales y de Ejecución, por extremismo en servicio y práctica, y Grandes y Generalizados Tantristas, por aferrarse a la dualidad de reino e inteligencia.
Se equivocan al permanecer dualistas en la no dualidad.
Por no comulgar sin dualidad no se despiertan.
Toda vida y liberación son inseparables de sus propias mentes, pero todavía vagan en el ciclo de la vida en vehículos de elección y descarte.
En La liberación natural mediante la visión desnuda y la inteligencia identificativa
Padma Sambhava, budista.