Cuando alguien renace ¿es el mismo que murió o es otro?

El rey preguntó: “Cuando alguien renace, Venerable Nagasena, ¿es el mismo que murió o es otro?” 

El anciano respondió: “No es el mismo, tampoco es otro.” 

“Te pido que me ilustres sobre esto.” 

“¿Qué piensas, gran rey? ¿El pequeño y suave infante que fuiste cuando recién nacido es el mismo que eres ahora ya crecido?” 

“No, aquel infante fue uno. Yo soy otro.” 

“Si esto es así, gran rey, ¡tú no has tenido madre, ni padre, ni crecimiento, ni educación! ¿Debemos concluir de este modo que hay una madre para la primera etapa del embrión, otra para la segunda etapa, otra para la tercera, otra para la cuarta, otra para el neonato y otra para el hombre adulto? ¿Es el niño que empieza su educación uno y otro el que la concluye? ¿Es uno quien comete un crimen y otro a quien le cortan las manos? 

“¡Ciertamente no! Mas, ¿Qué dirías tú, reverendo señor, de todo esto?” 

El anciano replicó: “Yo ni fui el pequeño infante recién nacido, ni soy el hombre adulto, pero ambos están comprendidos en una sola unidad siendo dependientes del mismo cuerpo.” 

“¿Podrías hacer un símil?” 

“Si un hombre encendiera una lámpara, ¿podría dar luz durante toda la noche?” 

“Si, lo podría.” 

“¿Es la llama que arde en la primera vigilia de la noche la misma que arde durante la segunda? 

“No son la misma” 

“¿Deberemos decir, entonces, que había una lámpara en la primera vigilia, otra en la segunda y otra en la tercera?” 

“No, porque la luz de la misma lámpara brilla durante toda la noche.” 

“De igual forma debemos entender la disposición de una serie sucesiva de dharmas. En el renacimiento un dharma se despierta, mientras otro se detiene, mas los dos procesos tienen lugar casi simultáneamente (i. e. son continuos). Por tanto, el primer acto de conciencia en la nueva existencia no es el mismo que el último acto de conciencia de la existencia previa, ni es otro.” 

 “Podías darme otro símil.” 

“La leche, luego de ser obtenida, se convierte después de un tiempo, en cuajada, posteriormente se transforma en mantequilla fresca y finalmente en ghee. ¿Sería correcto decir que la leche es la misma cosa que la cuajada, que la mantequilla fresca o que el ghee?” 

“No, eso no se podría afirmar, pero las últimas fueron generadas a partir de la primera.” 

“Justamente así debe ser comprendida la disposición de una serie de dharmas sucesivos.”


Las Preguntas del Rey Milinda