Una creación de delicias


Ahura Mazda dijo al santo Zarathustra:

Yo he creado, ¡oh santo Zarathustra!, una creación de delicias; nada que se acercase a ella ha podido ser creado antes; pues si yo no hubiese, ¡oh santo Zarathustra!, creado un lugar, una Tierra de delicias a la que nada de cuanto existe pudiera acercarse, el Mundo entero que está dotado de cuerpo hubiera sido transportado a Eryana-Vaeja.

Yo he creado los primeros y los mejores de los lugares y de los sitios, yo que soy Ahura Mazda.

El Eryana-Vaeja de la buena creación.

Al punto Agra-Mainyús, que está lleno de muerte, creó un antagonista. Una gran serpiente y el invierno que los Daevas habían creado. Los meses de invierno son allí en número de diez, los meses de estío, dos. Y éstos son fríos en el agua, fríos en la tierra, fríos en los árboles.

Al punto es en medio de la tierra, es en el corazón de la tierra, donde penetra el invierno, y es entonces cuando llega el colmo del mal.

Yo he creado el segundo y el mejor de los lugares y de los sitios, yo que soy Ahura Mazda.

Gau, la mansión de Sughdha.

Entonces Agra-Mainyús, él que está lleno de muerte, suscitó un antagonista. Una avispa que está llena de muerte para los rebaños y para los campos.

Yo creé el tercero y el mejor de los lugares y de los sitios, yo que soy Ahura Mazda, Murú, el santo, el sagrado.

Entonces Agra-Mainyús, él que está lleno de muerte, creó un antagonista. Malos discursos.

Yo creé el cuarto y el mejor de los lugares, yo que soy Ahura Mazda, Bakhdhi, la hermosa (ciudad), con sus elevadas banderas.

Entonces Agra-Mainyús, él que está lleno de muerte, creó un antagonista, animales feroces y carniceros.

Yo creé el quinto y el mejor de los lugares, yo que soy Ahura Mazda, Nisa, que está entre Murú y Bakhdhi.

Entonces Agra-Mainyús, él que está lleno de muerte, creó un antagonista. La duda (es decir, la incredulidad).

Yo creé el sexto y el mejor de los lugares, yo que soy Ahura Mazda, Haroyú, que es rica en casas.

Entonces Agra-Mainyús, él que está lleno de muerte, creó un antagonista, la pereza y la pobreza.

Yo creé el séptimo y el mejor de los lugares y de los sitios, yo que soy Ahura Mazda, Vaekereta, la mansión de Dujak.

Pero Agra-Mainyús, él que está lleno de muerte, creó un antagonista, una Pairika, Khnantheti, que se vinculó a Keresaspa.

Yo creé el octavo y el mejor de los lugares y de los sitios, yo que soy Ahura Mazda, Urvá, que está llena de campos del mejor trigo.

Pero Agra-Mainyús, él que esté lleno de muerte, creó un antagonista, la mancha fatal.

Yo creé el noveno y el mejor de los lugares, yo que soy Ahura Mazda, Khnenta, la mansión de Vehrkana.

Pero Agra-Mainyús, él que esté lleno de muerte, creó un antagonista, vicios infames y contra natura .

Yo creé el décimo y el mejor de los lugares, yo que soy Ahura Mazda, Harakaiti, la hermosa ciudad.

Pero Agra-Mainyús, él que está lleno de muerte, creó un antagonista, prácticas culpables y responsables, el enterrar los cadáveres.

Yo creé el undécimo y el mejor de los lugares, yo que soy Ahura Mazda, Haetumat, la (ciudad) brillante, resplandeciente.

Pero Agra-Mainyús, él que está lleno de muerte, creó un antagonista, el pecado de los Yatús. Es la señal mediante la cual se le reconoce. Es el índice en virtud del cual se manifiesta. A todas partes adonde llegan, los Yatús causan la muerte. Prometen dar cuanto se desea, pero son impostores que no vienen sino para dar la muerte y para herir el corazón.

Yo creé el duodécimo y el mejor de los lugares y de los sitios, yo que soy Ahura Mazda, Ragha, que consta de tres poblados.

Pero Agra-Mainyús, él que está lleno de muerte, creó un antagonista, la duda culpable y llena de orgullo.

Yo creé el decimotercero y el mejor de los lugares y de los sitios, yo que soy Ahura Mazda, Chakhra, la fuerte.

Pero Agra-Mainyús, él que está lleno de muerte, creó un antagonista, prácticas culpables y reprensibles: el quemar a los muertos.

Yo creé el decimocuarto y el mejor de los lugares y de los sitios, yo que soy Ahura Mazda, Varena la de los cuatro ángulos. Para ella nació Thraetaono que estranguló a la serpiente Dahaka.

Pero Agra-Mainyús, él que está lleno de muerte, creó un antagonista, señales funestas y males fastidiosos que llenaron aquellos lugares.

Yo creé el decimoquinto y el mejor de los lugares y de los sitios, yo que soy Ahura Mazda, Hapta-Hendu.

Pero Agra-Mainyús, el que está lleno de muerte, le creó un antagonista, señales funestas y un calor malo.

Yo creé el decimosexto y el mejor de los lugares y de los sitios, yo que soy Ahura Mazda, Al occidente de Ragha , donde el pueblo se gobierna sin reyes.

Pero Agra-Mainyús, él que está lleno de muerte, le suscitó un antagonista, el invierno, que fue creado por los Daevas (y la helada que mancha el país).

Hay aún otros lugares, otros sitios; llanuras y países.


Zend AvestaVendidad Sade, primer Fargard


El quinto día


De este modo la liberación es segura, pero, incluso después de haber sido instruidos de esta forma, hay quienes no pueden abandonar sus tendencias inconscientes a causa de un prolongado hábito, y bajo la influencia de la envidia y el mal karma sienten miedo ante los sonidos y las luces; no son cogidos por el gancho del rayo de luz de compasión, sino que vagan errantes hacia abajo hasta el quinto día del estado de bardo. Entonces, las legiones celestiales del bienaventurado Amoghasiddhi, con sus rayos de luz de compasión, saldrán a recibirles, y el camino de luz de los dioses celosos, construido por la envidia, también les tentará. En consecuencia, a fin de proporcionarle la instrucción necesaria, se debe invocar a la persona muerta por su nombre y decir estas palabras:

«Oh hijo de noble familia, escucha sin distracción. En el quinto día, una luz verde, el elemento purificado del aire, brillará y, al mismo tiempo, el bienaventurado Amoghasiddhi, Señor del Círculo, aparecerá delante de ti desde el Reino verde del norte, llamado el de las Acciones Acumuladas. Su cuerpo es de color verde, sostiene un doble vajra en la mano y se sienta en un trono de águila elevándose en el cielo, abrazando a su consorte Samaya-Tara. Está acompañado por dos boddhisattvas masculinos, Vajrapani y Sarvanivaranaviskambhin, y dos boddhisattvas femeninas, Gandha y Naivedya; así aparecerán ante ti estas seis formas del Buddha que surgen del espacio de la luz del arco iris.

»La luz verde de la sabiduría en su pureza básica, la sabiduría que realiza la acción, verde brillante, adornada con discos de luz, luminosa y clara, penetrante y brillante, vendrá hacia ti desde el corazón de Amoghasiddhi y su consorte y atravesará tu corazón de tal modo que tus ojos apenas podrán soportarlo. No tengas miedo de ella. En el juego espontáneo de tu mente, descansa en el estado supremo, libre de actividad y preocupación, allí donde no hay cerca ni lejos, amor ni odio. Al mismo tiempo, junto con la luz de la sabiduría, la luz roja y tenue de los dioses celosos, causada por la envidia, también brillará. Medita sobre la ecuanimidad, sin apego ni aversión. Pero si tu inteligencia es débil, entonces, simplemente, no te complazcas en ello.

»Al mismo tiempo, bajo la influencia de la envidia intensa, serás aterrorizado y escaparás de la luz verde, penetrante y brillante; por el contrario, te sentirás agradablemente atraído por la luz roja y tenue de los dioses celosos. En ese momento no deberás estremecerte ni sentirte confundido por la luz verde, penetrante y brillante, luminosa y clara, sino que deberás reconocerla como sabiduría. Deja que tu mente descanse en ella, relajada en un estado de no acción y suplícale con devoción manteniendo en tu mente este pensamiento: "Es el rayo de luz de la compasión del bienaventurado Amoghasiddhi. Tomo refugio en él". Es el gancho del rayo de luz de la compasión del bienaventurado Amoghasiddhi, llamado la sabiduría que realiza la acción. Deséalo y no huyas. Incluso si escapas, estará inseparablemente contigo.

»No tengas miedo. No te complazcas en la luz roja y tenue de los dioses celosos. Éste es el camino de luz tentador del karma acumulado por tu intensa envidia. Si eres atraído hacia él caerás en el dominio de los dioses celosos, y experimentarás una insoportable angustia de lucha y disputa. Es un obstáculo que bloquea el camino de la liberación, así que no te dejes atraer por él; abandona tus tendencias inconscientes. No las desees. Anhela tan solo la luz verde, brillante y luminosa, y repite con intensa concentración esta invocación al bienaventurado buddha Amoghasiddhi y su consorte.

»Ahora que por mi intensa envidia vago errante en el samsara,
que el bienaventurado Amoghasiddhi me guíe
en el sendero luminoso de la sabiduría que realiza la acción,
que su sublime consorte Samaya-Tara me dé su apoyo.
Ayudadme a cruzar el peligroso camino del bardo
y llevadme al estado perfecto del Buddha.

»Diciendo esta invocación con devoción profunda, te disolverás en la luz irisada que surge del corazón del bienaventurado Amoghasiddhi y su consorte, y te convertirás en un buddha samboghakaya en el Reino del norte, el de las Acciones Perfectas.»

Padma Sambhava - Bardo thodol
Traducción: Agustín López y María Tabuyo


Naturaleza del Maestro Espiritual


33-34.- Incluso aquel que, cogido en los lazos de la ilusión, se deja confundir por el discurso de los ignorantes y pone su confianza en un mal maestro, incluso aquel es conducido al verdadero maestro gracias a su intuición intelectiva. Esta intuición intelectiva (discernimiento) no es otra que la pura Ciencia que es una con la voluntad del Señor.

35.- Se dice entonces en el Antiguo Tratado (Mâlinîvijayottaratantra): «Aquel que, gracias a la voluntad de Shiva, desea ir hacia un verdadero maestro, es, por esta voluntad, conducido con el fin de obtener la beatitud en este mundo y la liberación»

36.- El descenso de la gracia (saktipâta) se produce aquí gradualmente, de manera que aquel que se apega a un mal maestro o a la enseñanza de otros tratados coge enseguida el buen camino, (el camino de los maestros shivaitas y de sus âgamas).

37.- Es la gracia, en sus múltiples variedades, la que distingue aquí a los verdaderos maestros y tratados de aquellos que no lo son. 

38.- El Svacchandatantra dice: «Los partidarios de Vishnu y otros están todos confundidos por la ilusión, y, en razón misma de su deseo de obtener la liberación, no se liberan.»

39-40a.- Pero aquel que, aun perteneciendo a una vía inferior, es experto en la toma de consciencia global (parâmarsa, equivalente a «discernimiento intuitivo») en el momento preciso cuando surge, se eleva hasta el verdadero camino, sin obstáculo, purificado como está por la gracia, en virtud de la pura Ciencia.

40b-41a.- Un discernimiento así, se manifiesta espontáneamente en ciertos seres que los tratados llaman seres realizados (sâmsiddhika) porque ellos no deben más que a si mismos (surge en ellos mismos) su conocimiento (poseyendo por intuición intelectiva la ciencia de todas las Escrituras).

41b-42a.- Si el Kirânagama declara que el conocimiento viene del maestro, de los tratados, o nace espontáneamente, precisemos que la segunda manera es superior a la primera y la tercera a las dos otras.

42b-43a.- La actividad de aquel en quien la verdadera intuición intelectiva surge espontáneamente se extiende a todos los ámbitos: es un maestro consagrado, abhisita, y es por las diosas (las energías divinas que animan la Consciencia, los sentidos y los mantras iluminando la vía que lleva al conocimiento unitivo del Si-mismo) de su propia consciencia que él es iniciado.

43b-44.- Se le celebra, a justo título, entre todos los maestros, como eminente. En su presencia, los otros maestros simplemente formados (kalpita) no están cualificados para iniciar a los discípulos; gracias a la intuición intelectiva, él comprende perfectamente el sentido integral de los tratados.

45-47a.- (Si se objeta: ¿cómo es esto posible?. Abhinavagupta responde): No hay en efecto ninguna verdad que la pura Ciencia no pueda aclarar. En el versículo del antiguo tratado (Mâlinîvijayottaratantra): «En él surge sin causa el conocimiento del significado de todos los tratados», el término akasamât, «sin causa», designa una causa (hetu) que no es evidente a los ojos de los mundanos (loka). Este conocimiento es por lo tanto denominado «sin ninguna razón», estando su causa en el despliegue de la Ciencia muy pura del supremo Soberano.

47b-48.- Se distinguen dos tipos de maestros, según que ellos tengan o no soporte, y el soporte puede ser total o parcial; aquellos que tienen el soporte parcial son de dos clases según que el soporte sea principal o secundario. Poseer un soporte quiere decir depender de otra cosa, a saber: de la sapiencia, prajñâ, y de su obra: los tratados.

49-50. «Aquel que conoce así verdaderamente el germen del corazón goza eternamente de poderes sobrenaturales, incluso si no ha visto el círculo sacrificial, es un yogui, es un iniciado. Aquel que conoce así, verdaderamente tiene la iniciación que lleva al nirvana sin recurrir a los granos de sésamo, a la mantequilla fundida, (soportes rituales) etc. » Esto es lo que proclama el venerable Parâtrimsikâ.

51-53.- El maestro realizado (sâmsiddhika) es conocido igualmente como «no formado»(akalpita). En cuanto al maestro que está realizado y goza del conocimiento de los tratados gracias a la realización de si sin recurso a los demás, los tratados lo llaman a la vez «no formado y formado» (akalpita-kalpaka). Este maestro puede ser de una clase diferente según que la vía sea intensa, mediana o débil. El es «no-formado» ya que ha obtenido la unción elevada; y «formado», gracias a los diversos medios que son la realización mística (bhâvanâ), la meditación, la recitación, los sueños o ensoñaciones, la observancia y la oblación.

54.- El Creador lo ha expuesto claramente en los textos sagrados, como el Vâjasanîyatantra, el Sarvavîra, el Brahmayâmala y el Siddâ.

55-57a.- (Se lee en efecto en el Sarvavîra): «Es desplegando la actividad de su libre deseo (icchâ) como el Señor Supremo (paramesvara) recurre a una variedad infinita de procedimientos, la devoción, la acción, la ciencia (vidyâ), la enseñanza del orden del mundo y de las reglas del conocimiento, o también los mantras, la iniciación. A través de esos procedimientos, el «Amo del universo entero» da su gracia a aquellos que transmigran»

57b-58. (El Brahmayâmala dice por su parte): «Por el despertar del círculo de la madres (la rueda de las energías divinas), por la purificación (los ritos sacramentales purificadores como a iniciación), la ascesis, la meditación, el yoga, la recitación, el Saber, la adoración y la propiciación de los mantras así como por la observancia, se puede ¡oh muy querida! obtener la identificación con kula; el conocimiento que permite llegar a la perfección de kula (que consiste en realizar totalmente la propia esencia de sujeto consciente, de naturaleza divina). 

59.- «Aquel, y solo aquel, en quien se percibe lo que hay que realizar –a saber: el Conocimiento de la Realidad– es él, en verdad, el maestro. La multitud de las causas enumeradas como contribuyendo a su formación, no existen más que para este fin.»

60a.- Según el Brahmayâmala, en efecto, éste no tiene ninguna otra característica que el Conocimiento de la Realidad (tattvajñâna).

60b-61a.- Se ha dicho: «Si un adepto que ha seguido las reglas sin la menor duda hacia el maestro (o habiendo seguido a su maestro con devoción, sin la menor duda) no obtiene aquello a lo que aspira (la Realización), ¿qué debe hacer?»

61b-62a.- (A esto Shiva responde) «Existe un medio para ser iniciado por si mismo gracias al conocimiento cuando fulgura intensamente el mantra. Así se realiza aquello que se desea (la Realización)». (Admitiendo así excepcionalmente la iniciación espontánea)

62b-63a.- «Es esencialmente, según este tantra, en ausencia de un maestro eminente y ferviente, que se puede gozar del conocimiento de su propio Si-mismo bajo la forma de una fulguración mantrica». (Es la luminosa intensidad de los mantras, su poder eficaz y la percepción directa que algunos pueden tener de esta fulguración, la que da el conocimiento salvífico, incluso en ausencia de un maestro cualificado y a pesar de que solo un maestro pueda transmitir válidamente un mantra)

63b-64.- Este texto precisa a continuación, a propósito de los actos a realizar con vistas de volver propicia a la venerable Diosa Raktâ que: «aquel que actúa constantemente así llegará a ser un maestro (âcârya) en un mes, sâdhaka en quince días, hijo espiritual (putraka) en una semana, samayin en tres dias y medio» (son los cuatro grados de iniciación shivaita)

65.- Es Raktâdevî quien, por el japa de los mantras, inicia gradualmente (de samayin a âcârya), pero esto no puede hacerse más que si no se ha encontrado un guru tal como ha sido definido.

66.- Si apropiarse de un mantra sacado de los Libros sagrados es, según el Siddhayogesvarîmata, un acto repudiable, es en razón de una carencia, a saber: la ausencia de la intuición fulgurante en un tal mantra (en un mantra extraído de un libro). Sin esta carencia no hay prohibición.

67-68. ¿Por qué guardan secretos los mantras, las substancias sacrificiales, etc.? A esto se responde: «Aquellos que, a pesar de estar privados de iniciación, han extraído los mantras de libros sagrados están en las tinieblas; ellos no buscan más que perjudicar a otros, y someterlos a su voluntad (por medio de la magia) y ellos no conocen la Realidad. Merecen ser censurados, eso está claro.

69a.- Las dos expresiones que contienen los dos primeros versos de la estrofa precedente están en relación de causalidad recíproca. (Es porque se está privado de iniciación que se saca un mantra de un tratado, y si se saca un mantra de un tratado no se encontrará un maestro para conferirlo. La vía normal es la de encontrar un maestro cualificado conocedor de los tratados y estudiar estos bajo su dirección)

69b-70a.- Aquel que no puede obtener sin el recurso de los tratados la Consciencia calificada de pura Ciencia, debe con la ayuda de un maestro, ponerse a la búsqueda de un tratado y seguir las prescripciones de éste.

70b-72a.- Habiendo, con devoción, rendido homenaje a un maestro con los medios que convienen, él recorre las diversas etapas de la iniciación, él comprende el significado de los tratados. Habiendo así obtenido la consagración, llega a ser él también un maestro formado. A pesar de ser solamente formado, él tiene el poder de acabar con todas las ataduras.

72b-73a.- En cuanto a aquel que obtiene el despertar (bodha) sin causa, según el orden real de las cosas, sobre algunos puntos particulares de los tratados, él es un maestro a la vez formado y no formado (kalpita-akalpita).

73b-74a.- De estas dos cualidades, la segunda (akalpita) es reconocida como excelente, su superioridad sobre la otra se basa en el hecho de que ella participa (amsa) de la pura Ciencia.

74b-76a.- Por lo mismo que los partidarios dualistas del Shivaismo consideran los shiva-liberados como inferiores (al Dios Shiva) originalmente libre, por lo mismo, para nosotros, los maestros que deben su conocimiento a los demás, son inferiores a los maestro realizados, dotados espontáneamente de conocimiento. En su presencia estos maestros inferiores, no teniendo la cualificación (adhikâra), deben, a imagen de los shiva-liberados, permanecer silenciosos o seguirlos en su acción.

76b-77a.- El maestro «no formado» que, para consolidar su propia convicción, ha obtenido, sin embargo, de otro maestro la consagración (samskâra: acto de un maestro gracias al cual su realización es terminada), es realmente Bhairava mismo. (Se hace más perfecto todavía por la confirmación de otro maestro o por la comprensión de los tratados)

77b-78a.- Es que, gracias a la comprensión progresiva de los Tratados, gracias a la aplicación constante en seguir la sabiduría del maestro (confirmando así su experiencia con el otro maestro), el conocimiento confirmado por si mismo de su propio Si, lleva, en razón de su plenitud, a la identificación con Bhairava.

78b-79.- Es por eso que el Kiranâgama declara que este Conocimiento tiene tres causas, ya que proviene del maestro, de los Tratados y de si mismo, y el Nisâtâna declara que estas causas se manifiestan de diversas maneras, tanto si actúan las tres concertadamente, tanto si se presentan en el orden inverso, tanto si no hay más que una sola de ellas (según la intensidad de la gracia). 

80-81.- Incluso si una muesca varía según los diversos instrumentos utilizados para hacerla, hacha, pala, sierra, el acto de cortar permanece, sin embargo, único, ya que único es el objetivo que se persigue. Se puede decir lo mismo de las causas del conocimiento (uno mismo, el maestro, los tratados), teniendo cada uno su propia naturaleza.

82.- El conocimiento (mâna) no determina espontáneamente y por si mismo la obtención (ashigama: descenso de la energía divina, de la gracia), puesto que se llama obtención a aquello que desemboca en la perfecta satisfacción del sujeto cognoscente (pramâtr). (A pesar de las explicaciones del maestro, es la plenitud vivenciada por el discípulo lo que le hace conocer (y reconocer) que ha realizado el Si mismo)

83.- Y una tal plenitud varía en cada uno, ya que depende de la intensidad de la gracia. También hay un lugar evidente para los medios de conocimiento (pramâna), incluso con relación de lo que es perfectamente conocido (pramita). 

84.- (Esta plenitud es comparable a la de un enamorado)¿Qué decir verdaderamente a aquel que no queda satisfecho más que después de haber visto y vuelto a ver a su amada, de haberla abrazado, de haberla durante largo tiempo deseado en su corazón?

85.- A pesar de la sobreabundancia de medios de conocimiento, no se nos puede reprochar los errores siguientes: obtener aquello que ya se ha obtenido, caer en el absurdo (vyarthatâ), ser arrastrado en un regreso al infinito. (¿Porqué añadir el conocimiento de los Tratados y la enseñanza de un maestro al conocimiento espontáneamente adquirido?)


Abhinavagupta, Tantraloka

Naturalidad


El rayo y el trueno pueden ser imitados por címbalos y tambores, los cambios del viento y de la lluvia pueden conocerse por el ritmo de su sonido. Lo que es suficientemente grande para poder ser visto puede ser medido, lo que es suficientemente claro para poder ser visto puede ser disimulado. Los sonidos audibles pueden ser armonizados, las formas perceptibles pueden ser distinguidas.

Lo más grande no puede ser encerrado ni siquiera por el cielo y la tierra, lo más diminuto no puede ser visto ni siquiera por los espíritus. Cuando se llega al punto en donde puedes establecer divisiones de calendario, distinguir colores, diferenciar sonidos claros y oscuros, saborear gustos dulces y amargos, la simple totalidad es dividida hasta convertirse en específica instrumentalidad.

Cuando estableces la humanidad y el deber, y cultivas los ritos y las música, la virtud cambia para convertirse en artificio. Cuando las personas hacen una exhibición de conocimiento para apabullar al ignorante, y planifican argucias para atacar a los que están por encima, quedan los que pueden mantener el país, pero no hay nadie que pueda gobernarlo.

Cuanto más conocimiento y capacidad hay, más decae la virtud; así, las personas perfectas son puras y simples, sin inútil complejidad. El gobierno del pueblo perfecto no se afirma ni pone dificultades, no exhibe nada que desear. La mente y el espíritu están en calma, el cuerpo físico y la naturaleza esencial están en armonía. En reposo encarnan la virtud, en la acción triunfan mediante la razón. Siguiendo el Camino de la naturalidad, se centran en lo inevitable. Son serenos y espontáneos, y el país está en paz; son reservados y sin deseo, y el pueblo es simple de manera natural. No luchan con cólera, y los bienes materiales son suficientes. Quienes dan no consideran esa benevolencia, y quienes reciben no decaen. Las bendiciones les son devueltas, pero nadie lo considera un favor.

En lo que concierne a la explicación no hablada y al Camino inexpresado, si los comprendes, a esto se llama el almacén celestial. Puedes tomar de él sin disminuirlo, puedes recurrir a él sin agotarlo. Nadie sabe dónde está, pero cuando intentas extraer de él, produce. A esto se llama la luz resplandeciente; la luz resplandeciente es lo que da sustento a todos los seres.


Wen Tzu (atribuido a Lao Tse)
Versión de Thomas Cleary

Ushtavaiti Gaza - Yasna 45


Óiganme atentamente, Oh, ustedes los que vienen de lejos y de cerca
Escúchenme ahora, reflexionen
Sobre estas enseñanzas, con pensamiento juicioso y claro.
El falso maestro no destruirá la existencia por segunda vez,
Su lengua se acallará y su credo ha sido expuesto.

Les hablaré ahora de los Dos Espíritus en el
Comienzo de la Creación.
El más Santo de los dos le dijo al Malvado:
“Ni nuestros pensamientos ni enseñanzas,
Ni nuestras intenciones, ni elecciones,
Ni nuestras palabras ni obras,
Ni nuestras conciencias ni almas están de acuerdo”.

Les hablaré ahora del Primer Principio de la Vida
Que Ahura Mazda, Quien lo Sabe Todo,
Me enseñó.
En verdad, quienes no cumplan con los
Requerimientos del mensaje sagrado,
Las sagradas palabras, como yo las entiendo y anuncio,
Recibirán desgracias al final de la existencia.

Les hablaré ahora de lo que es mejor en esta vida;
Actuar de acuerdo con el Espíritu de la Verdad,
El sagrada Asha.
Así conocerán a Mazda, quien lo creó,
Mazda, el padre de VohuMana,
la siempre activa Buena Mente,
Mazda, el padre de Armaity, de bondad y entusiasmo;
El Señor, que todo lo ve y no puede ser engañado.

Les hablaré ahora de lo que El Más Santo me enseñó,
Las mejores palabras que pueden oír los mortales :
“A quienes me hacen caso, con dedicación,
Les llegaré con las bendiciones de la
Perfección y la Inmortalidad a través de las acciones de
Su Buena Mente”.
Así habló Ahura Mazda.

Así proclamo a El Más Grande de Todos,
Canto Sus alabanzas a través de Su Verdad, que es benéfica para todos.
Que Mazda Ahura les brinde atención a través de El Espíritu Santo,
Pues la Buena Mente me ha enseñado a conocerlo a El.
Con su Sabiduría me conducirá hasta la meta Final.

Los que viven, los que han vivido y los
Que aun no han nacido,
Lograrán una de las recompensas que El manda.
Las almas de los justos permanecerán esplendorosamente
En la Inmortalidad.
Mas las almas de los malvados permanecerán en la desgracia.
Estas leyes las ha establecido Mazda Ahura por medio de
Su Autoridad Soberana.

Yo busco la aceptación de mi Señor
Por medio de mis cantos de alabanza y veneración.
Lo veo a El en mis ojos, como El Señor
Del Buen Pensamiento, el Señor de la Buena Palabra
Y Obra.
A El, Mazda Ahura,
Lo he conocido por medio de la Verdad!
Con sinceridad le rendiré homenaje en la Casa de las Canciones.

Buscamos agradarle a El, quien nos concedió
La capacidad de pensar para lograr
Bienestar o desgracia.
Que por medio de Su Soberana Autoridad, Ahura Mazda
Haga prosperar a nuestros campesinos,
Nuestros trabajadores y nuestro ganado.
Y la Buena Mente establezca el gobierno de la
Sagrada ley de la Verdad.

Lo exaltaremos a El, con nuestros cantos de devoción,
A El, afamado para siempre como Mazda Ahura, el Sabio Creador!
Ciertamente, a través de su Espíritu de Rectitud y
Buena Mente, ha ordenado que la
Perfección e Inmortalidad permanezcan en Su Reino
Y la fortaleza permanezca en Su Casa

A quien rechaza al mentiroso malvado y a los mortales que niegan a El Señor,
A quien rinde reverencia a El Más Alto, a través de
La Santa Fe de Su salvador designado,
Serás para ese, Oh Mazda, un amigo, un hermano, o
Hasta un padre!



Los Gazas, Himnos de Zaratustra
Por D. J. Irani
Traducido por Ramiro Besada

Musō Soseki - El malo


Pregunta.– ¿Porqué se dice que aquellos que practican el Dharma del Buddha entran a veces en la vía del Malo?.

Respuesta.– Se llama a todo lo que obstaculiza en la Vía del Buddha: acto del Malo. Si uno comete un acto del Malo, entra sin falta en la vía del Malo. Eso se explica en detalle en el capítulo de los asuntos del Malo del Mahâprajnâpâramitâ Sûtra, en el Sûrangama Sûtra, y en la cesación y contemplación del Tendai. No puedo citarlos en detalle a causa de que su longitud los hace fastidiosos. En cuanto a lo esencial se distinguen dos suertes de Malo: El Malo interior y el Malo exterior. El rey Malo, el pueblo Malo, etc., designan lo que viene del exterior para atormentar al practicante, y es el Malo exterior. Este rey Malo que reside en el sexto cielo del mundo del deseo se llama Malo celeste. El pueblo Malo está constituido por lo que se llama en general los genios de nariz larga. El rey Malo considera que los seres vivos del triple mundo son su propia familia, y es por lo que molesta a todos aquellos que quieren entrar en la Vía del Buddha. Sin embargo, aquellos que descuidan la práctica del Dharma del Buddha y que se dan únicamente a los asuntos mundanos no saldrán jamás de la vida-y-muerte. Es por eso por lo que el Malo celeste no los molesta. Todos los Malos tienen la capacidad de volar, de proyectar rayos luminosos de su cuerpo, de conocer el pasado y el porvenir, de tomar la forma del Buddha y de los Bodhisattvas, de predicar el Dharma sin ninguna dificultad en sus discursos. El Nirvâna Sûtra cuenta que: «Un día, Ananda, en su camino de retorno, encontró a los nueve millones de Malos celestes que habían tomado todos el aspecto del Buddha, retratos exactos del Venerado Sâkya. Cada uno de ellos predicaba el Dharma y todos murmuraban unos de otros. Ananda, petrificado, no podía distinguir cual era verdaderamente su maestro, el Venerado del mundo. Entonces, mirando a Ananda, el Venerado del mundo ordenó a Manjusrî que recitara una encantación divina. Todos los Malos celestes desaparecieron ... » . ¡Si Ananda mismo se encontró tan embarazado, con mucha mayor razón, lo estará un necio!. Los Malos celestes tienen la capacidad de tomar el aspecto exacto del Buddha y de explicar la doctrina como el Buddha. ¿Cuál obstáculo iban a encontrar entonces para tomar otras formas y predicar otras cosas?. Hay gentes que pretenden que desparramar flores y proyectar luz son cosas espléndidas. Ineludiblemente caerán en la vía del Malo.

Inclusive si un malo exterior no viene a causar así trastornos al practicante, si nacen pasiones en el corazón de este último, entonces se aferra a una visión falsa, el orgullo nace en él, se fija en la concentración del Zen, está orgulloso de su sabiduría, o bien, cayendo en el espíritu de los dos Vehículos, no busca la salida-del-mundo mas que para él solo, o bien, limitándose a la gran misericordia teñida por el deseo, le gusta aportar provechos a los seres vivos; todo eso es obstáculo al Despertar-sin-Superior y se designa bajo la denominación: Malo interior. A veces, retrocediendo en la práctica de la Vía a consecuencia de una enfermedad o bien destruyendo su cuerpo y su vida al sufrir condiciones kármicas, uno no puede cumplir la práctica de la Vía; todas estas situaciones son malignas. O bien, por la aparición repentina y bizarra de la idea de la Vía, uno no quiere ya perder un instante y vierte abundantes lágrimas día y noche, lamentándose de no alcanzar la Iluminación; eso es también una forma de obstáculo del Malo. Ocurre también, que es solo la pereza la que se desarrolla de día en día y que inclusive si en raros momentos uno tiene el deseo de practicar, eso deviene como un enfermo sin apetito delante de una comida; eso es también un obstáculo del Malo. Si ha devenido posible que uno no sienta ninguna repugnancia inclusive de comer las heces y de beber la orina de un tal monje es porque uno cree demasiado en él; eso es también un obstáculo del Malo. Cuando uno constata que la conducta de un tal monje es mala, uno rechaza el verdadero Dharma y se aleja; eso es también un obstáculo del Malo. Las pasiones fuertemente atizadas tales como la codicia y la cólera son también una obstrucción del Malo. Si uno teme que las pasiones no se aticen, uno se aflige; es también una obstrucción del Malo. Tales obstrucciones del Malo se producen a causa de la falsa vigilancia del practicante, o bien actúan justo antes de su propia destrucción causada por la vigilancia verdadera. Eso sería por ejemplo, como se intensifica la luz justo antes de extinguirse. En todas los casos, si uno no tiene el espíritu agitado, no cometerá falta.

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