Los ocho entendimientos



De todo corazón, día y noche, un discípulo del Buddha debería recitar y meditar sobre los ocho entendimientos descubiertos por los mahasattvas, los grandes seres.

I
El Primer Entendimiento es la consciencia de que el mundo es impermanente. Todos los regímenes políticos están sujetos a la caída; todas las cosas compuestas de los cuatro elementos están vacías y contienen las semillas del sufrimiento. Los seres humanos están compuestos de los cinco skandhas, agregados, y existen sin un yo separado. Siempre están en proceso de cambio – constantemente naciendo y constantemente muriendo. Están vacíos de un yo, sin soberanía. La mente es la fuente de toda la confusión, y el cuerpo el bosque de todas las acciones impuras. Si meditamos en estos hechos, podemos ser gradualmente liberados del samsara, el círculo de nacimiento y muerte.

II
El Segundo Entendimiento es la consciencia de que más deseo trae más sufrimiento. Todos los apuros en la vida diaria surgen del odio y del deseo. Aquellos con poco deseo y ambición son capaces de relajarse, sus cuerpos y mentes libres de enredos.

III
El Tercer Entendimiento es que la mente humana está siempre buscando posesiones y nunca se siente satisfecha. Esto da lugar a acciones impuras que aumentan por siempre. Los Bodhisattvas sin embargo, siempre recuerdan el principio de tener pocos deseos. Viven una vida simple en paz para poder practicar el Camino, y consideran la comprensión del entendimiento perfecto como su única labor.

IV
El Cuarto Entendimiento es la consciencia de hasta que punto la pereza es un obstáculo para la práctica. Por esta razón, debemos practicar diligentemente para destruir los factores mentales insanos que nos ciegan, y para conquistar los cuatro tipos de Mara, para así liberarnos de las prisiones de los cinco agregados y los tres mundos.

V
El Quinto Entendimiento es la consciencia de que la ignorancia es la causa del interminable círculo de nacimiento y muerte. Por lo tanto, los bodhisattvas siempre se acuerdan de escuchar y aprender para desarrollar su entendimiento y elocuencia. Esto les permite educar a los seres vivientes y conducirlos al reino de la gran alegría.

VI
El Sexto Entendimiento es la consciencia de que la pobreza crea odio e ira, lo cual crea un círculo vicioso de pensamientos y actividad negativos. Cuando practican la generosidad, los bodhisattvas consideran a todo el mundo, tanto a amigos como a enemigos, como iguales. Ellos no condenan las antiguas maldades de nadie, ni odian a aquellos que están actualmente causando daño.

VII
El Séptimo Entendimiento es que las cinco categorías de deseo provocan dificultades. Aunque estamos en el mundo, deberíamos intentar no ser alcanzados por asuntos mundanos. Un monje, por ejemplo, tiene en posesión solo tres togas y un cuenco. Él vive de forma sencilla para así poder practicar el Camino. Sus preceptos le mantienen libre de apegos a las cosas mundanas, y trata a todos por igual y con compasión.

VIII
El Octavo Entendimiento es la consciencia de que el fuego de nacimiento y muerte está ardiendo, causando sufrimiento sin fin en todos lados. Deberíamos tomar el Gran Voto para ayudar a todos, sufrir con todos, y guiar a todos los seres hacia el reino de la alegría.

Estos ocho entendimientos son los descubrimientos de los grandes seres, buddhas y bodhisattvas que han practicado diligentemente el camino de la compasión y el entendimiento. Ellos han navegado en el bote del Dharmakaya hasta la orilla del nirvana, pero luego vuelven al mundo ordinario, habiendo abandonado los cinco deseos, con sus mentes y corazones dirigidos hacia el camino noble, usando estos ocho entendimientos para ayudar a todos los seres a reconocer el sufrimiento en este mundo. Si los discípulos del Buddha recitan estos ocho entendimientos y meditan sobre ellos, pondrán fin a los incontables malentendidos y dificultades y progresarán hacia la iluminación, dejando atrás el mundo de nacimiento y muerte, habitando para siempre en la paz.


El Sutra sobre los ocho grandes entendimientos de los grandes seres
Versión: Thich Nhat Hanh